
La formación jurídica empresarial
Las empresas familiares son sociedades creadas, así como gestionadas, por los miembros de una misma familia. El objetivo de este tipo de sociedades es conseguir la continuidad a manos de la siguiente generación de la familia. La empresa familiar no cotiza en bolsa y no tiene socios o accionistas externos a la sociedad. Ya que los mismos son los propios miembros de la familia.
La formación jurídica empresarial es esencial para cualquier clase de empresa, y ello también incluye a las empresas familiares. La formación es indispensable para todas aquellas pequeñas o medianas empresas de índole familiar que no dispongan de un departamento de asesoría jurídica o bien no cuenten con los servicios de una asesoría externa.
Formación jurídica en empresas familiares
La formación jurídica empresarial es clave para poder obtener los conocimientos y la preparación necesaria. Para poder enfrentarse satisfactoriamente a todas aquellas cuestiones jurídicas y legales básicas. Dedicar tiempo, esfuerzo y recursos a la formación jurídica de todos los miembros y empleados es crucial.
Gracias a la formación jurídica empresarial, los miembros o socios podrán tramitar y gestionar diferentes aspectos. Como la asistencia a actos de conciliación, la negociación y redacción de contratos, las consignaciones judiciales o la redacción de cartas de despido, entre otras muchas posibilidades.
Incluso, en aquellos supuestos en los que la empresa familiar disponga de un asesor jurídico, un departamento jurídico o un departamento de recursos humanos. Será fundamental que el personal se encuentre en constante formación. Para adecuar sus conocimientos a los nuevos tiempos y la nueva legislación vigente.
Toda la formación que reciba el personal de la empresa supondrá una inversión de gran relevancia para cualquier empresa familiar, ya que será capaz de aportar un mayor valor añadido a la sociedad. De este modo, podrán agilizarse todos trámites y gestiones que se lleven a cabo. Asimismo, podrán evitarse las multas con motivo de la falta de la presentación de documentación o bien no ajustarse a los plazos establecidos.
Pros y contras de las empresas familiares
Los pros o fortalezas que son capaces de brindar las empresas familiares son tanto la cultura familiar como de transmisión de valores en el mundo empresarial-laboral. Ofrecen una gran flexibilidad, capacidad de planificación a largo plazo, así una mayor cercanía con los consumidores o clientes de la empresa.
Asimismo, las empresas familiares también tienen sus debilidades o contras. Su principal punto débil es la gran dificultad para conseguir financiación. Las familias que montan empresas tienen muchos reparos a la hora de tomar riesgos, ya que es su propio patrimonio es el que se encuentra en juego. De ahí que en muchas ocasiones la capacidad de crecimiento se encuentre limitada.
Asimismo, la falta de experiencia y preparación de los sucesores, así como la falta de éstos puede dar lugar a que la empresa termine desapareciendo para siempre. Sin embargo, las empresas que logran superar este tipo de problemas o inconvenientes se presentan como grandes oportunidades para el futuro.
Muchas compañías o empresas españolas tienen sus orígenes en empresas familiares. Instruir a las empresas familiares en materia jurídica y legal se presenta como una clara necesidad para evitar que incurran en faltas, incumplimientos o errores que puedan llegar a salir realmente costosas.